A todo empresario le ha pasado alguna vez. Siempre hay productos que no resultan tan populares entre sus clientes. La temporada pasa y se quedan en la tienda. La tendencia ya ha terminado. Es muy difícil sacar ganancias de estos productos una vez que su momento ya ha finalizado y se ha recibido nueva mercancía. Sin embargo, ignorarlos y dejarlos en depósito es uno de los errores más grandes que los empresarios nuevos suelen realizar. No hay que olvidarse de ellos, serán de mayor utilidad si de alguna u otra forma los vendes.
A continuación, te compartimos unas estrategias para que te deshagas de esos productos con rapidez. De lo contrario, podrías perder a clientes fieles por intentar venderles productos obsoletos o descatalogados.
Promociones y ofertas
Las puedes realizar en tiendas físicas o a través de Internet. Las promociones motivan a los clientes a actuar y a conocer más de aquello que pones en promoción. Funciona muy bien con productos que, por una u otra razón, no lograste vender en su momento. Ahora les puedes dar otra oportunidad y, además, añades un atractivo extra para tu clientela. Es una opción muy utilizada y por una buena razón: funciona.
Amplía tus fronteras
En otras palabras, apuesta por los negocios en otros países. El producto que ya no sea útil en tu localidad, puede ser una necesidad en otro lugar del mundo. Esto sucede mucho con las prendas de ropa, que varían según la temporada del año. Quizás la ropa de verano ya no funcione en tu país cuando llega el otoño, pero en otro país puede que el verano apenas esté empezando, por lo que resulta una opción inteligente probar en ese mercado.