El tema de las negociaciones comerciales puede resultar complicado para algunos, y mucho más cuando incluye documentación legal, como los contratos, ya sean individuales o colectivos.
Hay que destacar que no a todos les resulta fácil llegar a un acuerdo y, mucho menos, cuando existen ciertas expectativas relacionadas con el dinero. En el asunto influyen varios elementos, por ejemplo: emociones, egos, poder y posición.
Sin embargo, hay ciertas formas de hacer más llevadero el proceso, aminorando riesgos, con tan solo seguir estos sencillos consejos:
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Paciencia
Hay que tener en cuenta que los procesos de negociación, cualesquiera que sean, deben realizarse con tiempo. Siempre habrá algún que otro detalle que deberá ser discutido con más profundidad, o con el que simplemente no se llega a un acuerdo.
Tratar de correr o apresurar un tema puede llegar a costar más dinero del debido, además de que generará estrés en todos los participantes.
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Controlar las expectativas
A la hora de ir a una negociación comercial es imperativo bajar el ego y no llevar expectativas muy altas. ¿La razón? Toda negociación es diferente, por lo que no debes dejarte llevar por experiencias pasadas o de otros que hayan vivido una situación similar.
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Escuchar a otros
Las experiencias de otros pueden ayudar, pero hay que recordar que cada caso es distinto y completamente nuevo.
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Cero suposiciones
Otra cosa por la que no debes dejarte llevar son las suposiciones. No debes asumir algo que no conoces al 100%. Lo mejor en estos casos es preguntar y asegurarte de lo que piensa la otra parte.
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Emociones bajo control
Hay ciertos momentos cruciales en los que ponerte muy emocional puede jugarte una mala pasada: dirás cosas que no querías o te enfrentarás a otros por diferencias de posiciones. Lo mejor es calmarse y pensar bien.
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Investiga y comprométete
Estar bien informado es un punto clave en cualquier negociación. Algunas preguntas que puedes plantearte son: ¿Qué hace la competencia? o ¿cuáles son los precios para comparar? Asimismo, conviene que te sientas cómodo con el resultado de la negociación, pues resulta un compromiso inquebrantable.
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Creatividad
No te cohíbas a la hora de proponer ideas nuevas y frescas, que pueden resultar agradables para la otra parte.