Si eres emprendedor, sabes de cine y, además, tienes algunos ahorros reservados para invertir en algo rentable, la industria del celuloide puede ser la horma de tu zapato.
Conocimiento del medio, identificación de talento, contactos, intuición, timing, análisis de tendencias, psicología… Este tipo de inversión va a requerir de todo tu arsenal de recursos, de mucho esfuerzo y de un buen manejo de la presión de la incertidumbre, pero es un pasivo que puede darte dinero durante mucho tiempo.
Invertir en cine es, en definitiva, como invertir en bolsa. Solo debes sustituir la lectura de diarios económicos por la de noticias de cine para interpretar correctamente qué producciones pueden llegar a ser las más taquilleras.
Rentable por razones de peso
Como destacan algunas páginas especializadas, invertir en una película tiene otras ventajas además de los beneficios de la recaudación en taquilla: los incentivos fiscales.
A partir de la creación de la Ley de Cine, las inversiones en la industria del cine han crecido considerablemente, ya que la norma permite que los productores deduzcan de su cuota el 20% del primer millón, y el 18% de 1 millón a 15 millones del total, descontando subvenciones obtenidas. Es decir, compensan saldos y reducen el impuesto que tienen que pagar.
El modelo de negocio es sencillo. Cualquier persona puede ser socio, a partir de la Agrupación de Interés Económico (AIE) que crea el productor de la película. Según la participación, el socio puede deducirse en su declaración de IRPF en el caso de la persona física, o en la de impuesto de sociedades si es una compañía, entre el 18% y el 40% del coste del largometraje.
Se genera el negocio no por los beneficios que se produzcan de la explotación del producto final, sino del beneficio tributario, tenga éxito o no la película.
Capital nacional
Sin embargo, para disfrutar de dichos beneficios fiscales, existen ciertas condiciones, por ejemplo, que la película esté hecha en España, y que haya sido financiada, por lo menos, un 50% con capital del país. Por supuesto, estas ventajas fiscales están dirigida al público empresarial y a inversores individuales.
Durante el año 2015 se estrenaron en España 188 películas, generando para la industria cinematográfica 110 millones de euros, 14 millones menos de lo que se recaudó en 2014.
Si tu intención es colocar tu capital en un negocio rentable y seguro, puede que tengas que ir más a menudo al cine, pero no para desconectar sino para todo lo contrario.
También se puede invertir en cine sin tener que ser el productos. Hay muchos nichos de mercado cinematográfico que se pueden ocupar con una nueva empresa y pueden llegar a ser igual de rentables.
Un saludo!
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Me gustaría saber más de como, donde y cuando poder invertir en la industria cinematografica