Diariamente, en el mercado tecnológico virtual, se crean millones de aplicaciones móviles que compiten por un lugar privilegiado entre las de su categoría. Por ello, cuando una persona emprendedora decide explorar este campo puede dudar entre si será rentable o no invertir en el mismo.
Debido a esto, la startup tecnológica Woffu (organización que desarrolla productos o servicios de gran innovación), realizó una serie de recomendaciones que se tienen que valorar para predecir el éxito o fracaso de una nueva aplicación:
- Principalmente hay que calcular el coste de adquisición de un cliente (Customer Acquisition Cost), dividiendo cada mes los costes invertidos en ventas entre el número final de clientes captados.
- También se debe calcular el número de clientes que se pierde mes a mes entre los usuarios activos. A esto se le llama Chun Race y ayuda a obtener la fidelidad de los clientes.
- La MRR (Month Recurring Revenue) es una métrica que ayuda a calcular los ingresos que se generan cada mes. Mientras que la ARPA (Average Revenue Per Account) muestra los ingresos medios que genera un cliente. Es importante que el ARPA sea ascendente.
- Para saber cuál podría ser el ingreso medio de un cliente se debe multiplicar el ARPA por el tiempo medio de permanencia de un cliente, a esto se le llama LTV (Life Time Value).
- Si se quiere saber cuánto es el tiempo que se tardará en recuperar la inversión para captar a un cliente se debe comparar el CAC (Customer Acquisition Cost) con el ARPA (Average Revenue Per Account). El tiempo que se recomienda debe estar por debajo de los 12 meses.
- Durante la proyección del éxito de la aplicación es importante tener en cuenta cuál es el porcentaje de flujo negativo mes a mes (Burn rate), y así comprobar cuál sería la velocidad con la que se consumiría la inversión.
Es indispensable realizar estas indicaciones paso a paso con el fin de mostrar a futuros inversores las ganancias y pérdidas que se pueden obtener al respaldar la nueva app móvil.
Por otra parte, esto le sirve al emprendedor para saber si debe continuar o no con el proyecto, pero sobre todo para mejorarlo en pro de los actuales requerimientos.
Imagen: Freepik