Saber más sobre las funciones cognitivas MBTI podría ser muy eficaz para hacer que un emprendimiento crezca y goce de prestigio, al contribuir con un ambiente laboral sano donde todos trabajen juntos en pro de alcanzar los objetivos empresariales. Escuelas de negocios como Euroinnova ofrecen formaciones online para especializarse en esta área reconociendo su importancia en el mundo empresarial.
El MBTI clasifica a las personas en cuatro dimensiones binarias que representan una preferencia de comportamiento:
- Extraversión (E) vs. Introversión. (I)
- Juicio (J) vs. Percepción (P).
- Sensación (S) vs. Intuición (N).
- Pensamiento (T) vs. Sentimiento (F).
Cada uno tiene dos posibles resultados, que derivan en 16 tipos de personalidades. Saber cuál es la personalidad de los miembros del equipo es clave para reclutar al empleado o socio más apto para el puesto. Así mismo, contar con personas de diferentes personalidades, cada una acorde a sus labores, fortalece al equipo al complementarse unos con otros.
¿Cómo utilizar las funciones cognitivas MBTI para seleccionar a tu equipo de trabajo?
Las funciones cognitivas junto con la evaluación de las competencias, la experiencia profesional, las destrezas interpersonales y la ética de trabajo son elementos que juegan un papel fundamental a la hora de elegir al equipo de trabajo.
Las funciones cognitivas pueden servir para reconocer las características y habilidades que son necesarias para ejercer determinadas tareas, valorar las preferencias cognitivas del aspirante al puesto y comparar su personalidad con las necesidades del puesto, por ejemplo, si el trabajo demanda un alto nivel de organización y planificación, se podría buscar a alguien con preferencia de Juicio (J) vs. Percepción (P).
Vinculación de las funciones cognitivas con el liderazgo y el desarrollo profesional
Los emprendedores pueden valerse de las funciones cognitivas para entender mejor a quienes trabajan a su lado y adaptar sus tareas de modo tal que sean una fuente de inspiración y confianza para su equipo. Si un líder con una preferencia de Juicio (J) se suele inclinar a una estructura y gerencia más estricta, mientras que un líder con preferencia de Percepción (P) puede ser más adaptable y flexible.
Por otro lado, los empleados a través de ellas pueden identificar sus fortaleces y debilidades. Ejemplo: un individuo con tendencia a la Intuición (N) puede trabajar en mejorar su atención a los detalles si representa una debilidad en sus labores.
Perfiles que encajan mejor con cada puesto
- Para posiciones directivas y ejecutivas encajan los líderes naturales, que se toman muy en serio sus compromisos y responsabilidades. Estratégicos, analíticos y lógicos como: Ejecutivo ESTJ o Arquitecto INTJ.
- Para diseño y marketing figuran las personalidades creativas y pragmáticas como: Activista ENFP, Aventurero ISFP, Virtuoso ISTP, Innovador (ENTP) o Animador (ESFP).
- Para puestos de investigación, ingeniería y programación, aquellos que son precisos y teóricos, que resuelven los inconvenientes de forma independiente como: Ejecutivo ESTJ, Logista ISTJ, Lógico INTP o Innovador ENTP.
- En ámbitos financieros, de administración y contabilidad, las personas prácticas y enfocadas como: Virtuoso ISTP o Logista ISTJ.
- En ventas y atención al cliente, los que poseen vocación de servicio y son pacientes como: Defensor ISFJ y Cónsul ESFJ.
- Para recursos humanos, quienes se esfuerzan por hacer sentir a gusto a otros como: Defensor ISFJ, Mediador INFP y Cónsul ESFJ.
En definitiva, estudiar estos procesos mentales hará que el emprendedor sepa cómo reacciones ante los estímulos de su entorno.
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