Una de las nuevas tendencias dentro del sector empresarial es el aprendizaje automático. Este método está basado en la inteligencia artificial, es decir, en lo que las máquinas aprenden.
El objetivo de estos proyectos es lograr que los robots alcancen el nivel de inteligencia ejecutiva para hacer un uso más eficiente de la información.
Con este aprendizaje automático se pretende ofrecer mayor inteligencia al hardware y al software que forma parte de nuestras vidas, como en los smartphones, máquinas de café, colchones inteligentes, y otro sin fin de objetos.
Si las máquinas logran alcanzar la capacidad de aprender que se espera, es muy probable que haya una gran transformación en muchas empresas. Esto traerá como consecuencia mucho desempleo en el nuevo paradigma empresarial del futuro.
En la actualidad, casi todas las grandes empresas están invirtiendo enormes sumas de dinero para investigar el aprendizaje automático y la inteligencia artificial.
Muchas startups también investigan el aprendizaje automático, ya que comprenden los grandes beneficios que podría aportarles en un futuro muy cercano. Esto último con el objetivo de sobrevivir en un entorno competitivo cada vez más hostil.
Elementos del aprendizaje automático
Tan solo tres elementos conforman la ecuación del aprendizaje automático: la tecnología la potencia computacional y los datos.
Las grandes empresas poseen los recursos financieros, las tecnologías y los datos que les permitirán invertir en el desarrollo de algoritmos de inteligencia artificial.
Por otro lado, están las grandes cadenas de tiendas, supermercados, empresas de servicios y universidades, que poseen grandes volúmenes de datos, pero no cuentan con las tecnologías para implementar el aprendizaje automático.
Y por último están las startup, que poseen el talento humano y propuesta de negocios innovadoras que podrían interesarle a las grandes empresas y cadenas de tiendas, por los beneficios y rentabilidad que podrían aportarles.
Estrategia de supervivencia de las startups
Es evidente que las startup no podrán competir con las grandes empresas como Google, Amazon o Facebook. De hecho, es muy probable que muchas de ellas sean adquiridas por las gigantes marcas que lideran el mercado.
Para sobrevivir ante el futuro escenario que se les avecina, los empresarios tendrán que cambiar sus enfoques y establecer alianzas con las grandes empresas que poseen los datos.
Estas startups deberán actuar rápido y buscar la manera de crecer para obtener el mayor volumen de datos en el menor tiempo posible. Esta es una de sus opciones para volverse atractivas para otras empresas.
Las pequeñas empresas tienen la ventaja de contar con estructuras de costes flexibles, personal capacitado y mucha creatividad para proponer nuevos negocios innovadores que
